miércoles, 16 de octubre de 2019

A pesar de mí

Lamento haberte fallado,
¿Cómo puedo hablar de promesas?
¿Vociferar de reclamos?
Si fui la primera en marcharse, 
fui la primera en rendirse, 
buscando excusas para odiarte y odiarme en ti.

Creo que te amo con la fuerza de lo poco que tengo, con los recuerdos que todavía no se difuminan entre mis pensamientos, con todo el dolor que es capaz de sentir mi egoísta corazón, y en la miel de mi justificada soledad.

Realmente creo que te amo, en el silencio lo noto, en la indiferencia que late en mis oídos, puedo sentirlo en tu voz que se ha ido para siempre. En esta vida no podré mirarte nunca más a los ojos, no podré acariciar tus manos con mis dedos, y jamás sabré cómo de cálidos pueden volverse tus besos.
Y te amo hoy, a pesar de mí.