Ahora soy solo mía, tengo la capacidad de amar, pero me pertenezco. La última vez que puse mi alma a disposición de alguien más, acabé rota.
Ayer fue queja, hoy es lección. Somos pocos pero vastos, suficientes. Y tengo fe en lo que soy y seré hasta que muera.
Y con eso me basta para dar un buen amor .
No hay comentarios:
Publicar un comentario