jueves, 10 de enero de 2013

Quería decirte... y la distancia

Era de noche, no había nadie en casa como de costumbre. Estaba harta de los cigarrillos, las caladas no eran suficientes para acallar un poco a mi mente. Quise leer un libro, explorando con mi imaginación expandida al máximo, con los paisajes y personajes que éste describía; yo solo quería olvidar el mundo real. Me invadió el miedo porque en mi cerebro no se hallaban las imágenes cotidianas, los sentimientos supuestamente perpetuos, la ansiedad por ese anhelado sueño adverso. Nada de eso habitaba, porque para variar estaba pensando en ti. ¿En qué momento decidió aparecer sin que yo le diera bienvenida?
De acuerdo, creía estar enamorada, creía amar, tenía la estúpida idea de que mi experiencia y los años que llevaba encima me regalaban un poco de credibilidad, de éxito. Y al final me chocó directo al pecho una sensación irremediablemente distinta, injusta. Me negaba a creer que algo así dominara lo que yo creía un amor inquebrantable, un deseo que ni volviendo a nacer se retiraría de entre mi piel y mi alma. La vida me obsequió una sonrisa sarcástica aplicándome una ley desconocida, llegó él. Entonces mi corazón fue enjuiciado; él desesperado pedía mi auxilio, ¡decide qué sientes! Decía una y mil veces. Hasta que después de los meses, los mensajes de quien sí recibía y de quien no, la búsqueda desesperada de uno y la indiferencia del otro, el amor y el odio. Decidí que a mi supuesto gran amor solo le tenía un gran aprecio y una pizca de obsesión, encontré que lo único que le hacía atrayente era la imposibilidad de tenerlo, las ganas inmensas de verme sufrir escribiéndole poesía día tras día. Llevándome así a un destino totalmente distinto al que forjaba y amoldaba en mis sueños a mi gusto. Y después de esa noche quería decirle al verdadero, al que me importaba, al extraño pasajero de cabello negro y desastroso, al muchacho de ojos tristes pero profundos, al insensato e inestable, al prisionero de los fantasmas de su pasado; quería decirle, quería besarle, quería despojarlo de sus ropas, quería hacerle el amor.
Pero la distancia lo impidió.

http://youtu.be/ecb6BNWwKf4

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