viernes, 11 de marzo de 2022

No hay nada que perdonar

Y a todo se reduce esto, precisamente no fui muy amable. Volví este amor a la basura. Pueden haber pasado años, pero ahora que vi a la muerte a los ojos, pensé en ti y todo se fue al carajo. Porque me di cuenta que te amaba, no sé cómo, no sé por qué, no sé si al final yo deseché la relación. Estoy pagando con sangre mi actitud, porque no sabes cómo duele no tenerte.

Sé que voy a seguir creciendo y te voy a olvidar, pero mientras tanto sólo desearía que Dios me dejara decirte te amo una última vez, aunque sea imposible. Sé que me estoy humillando pero no planeo volverme a engañar, ni fingir que estoy bien, tal vez no te amo, pero hoy te amo.

¿Qué hago con este agobio, amor nunca mío? Vida, ayúdame a olvidarlo, porque duele como las quemaduras del incienso en mis muñecas. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario