jueves, 30 de noviembre de 2023

Ya no me importa nadie...

 ...Que no sea mi esposo y yo.
Esto era lo que querían que dijera ¿no? Vale, que empiece el juego.
Estoy cansada de dejarme pisotear, de quedarme callada, y si quieres que me suba a un ladrillo; me voy a subir a la azotea. Ya no existe lo que creías conocer, según tú, esa persona nunca existió. Soy un demonio, y estoy harto. Vamos a escupir veneno.
 
¿Cuál es tu infierno favorito? ¿En dónde irónicamente nieva? ¿O el de los clichés donde las llamas lo consumen todo? Inútil pero viva, glotona, pero más inteligente de lo que tú serás nunca. Estaba bastante aterrizada, pero hoy voy a volar y a reírme a carcajadas del sufrimiento de los demás.
 
Soy detestable ¿no? Soy cruel, mis ojos te lo dicen, tengo los ojos de mi padre, no tengo la conciencia tranquila, felicidades: vaya descubrimiento. Pero, bah, no me importa tu opinión, sólo la de mi esposo y la mía. Mientras ambos sepamos quien soy, no me importa nada más. Juro que no voy a permitir que nadie me sobaje una vez más.
 
No me vas a reducir a nada, maldita sea. Nadie vio lo que yo vi, nadie sangró como yo sangré, al menos nadie que haya querido opinar sobre mi vida y sobre mi modo de ver las cosas. Orgullosamente intuitiva, escritora, chingona. No necesito de nadie que no sea yo en una bicicleta y a un lado mío Andrés en la suya sonriéndome.

No hay comentarios:

Publicar un comentario