No me vuelvo a enamorar.

No vuelvo a sentir un relajante frío que recorre mi cuerpo cada vez que veo al objeto de mi amor,
No vuelvo a dedicar mis escritos más bellos, encarcelada en la melancolía.
No vuelvo a angustiarme por hacer sus días felices, ni por conversar con él.
No vuelvo a deleitarme con unos ojos hermosos, ni con unos labios deseosos.
No vuelvo a reír ni a llorar por culpa de unas palabras dulces o gestos indiferentes,
No vuelvo a brincar con alegría por pensar en él todo el día.
No vuelvo a relatarle mis penas de amor a mi mejor amiga, ni espero su consuelo, su apoyo.
No vuelvo a sentir al amor surgir de mi estómago hasta mi garganta,
No vuelvo a escuchar canciones románticas y a relacionarlas con él.
No vuelvo a recorrer caminos poco transitados y a esperar inútilmente su llegada,
No vuelvo a observar embelesada a la luna y a buscar ese rostro en su blancura.
No vuelvo a abrir las puertas de mi confianza, mi alma, mi espíritu.
No vuelvo a derramar lágrimas por promesas incumplidas,
No vuelvo a ilusionarme por esos pequeños detalles que alumbraban mis ojos,
No vuelvo a creer que amarlo es suficiente para ambos.
No me vuelvo a enamorar.