viernes, 28 de enero de 2011

El innombrable


El que dicen que no vale mis lágrimas
Del que mis amistades no pretenden saber más
El monstruo cruel de mi gran daño
Es el varón que tanto yo amo.

Él, que me abandonó cuando más lo adoraba
Que me cambió sin atrición, quien me lapidaba
Es quien será siempre amo de mis sueños
Quien controla todos y cada uno de mis anhelos.

Su nombre está oculto entre mis letras, innombrable le dicen
Quizá para intentar encubrir el dolor de su adiós que me persigue
Dije que no, que no lo requería, que de mi mente saldría
Pensé, tal vez…sólo tal vez, lo olvidaría y finalmente me recuperaría.

El deleznable mujeriego y engañoso, así es él
Pero aún así su amor me dolió perder
Me llevó de cabeza directo al infierno
Logró con afección acribillarme con un adusto verso

Quien me ha encadenado al pasado
La persona que tanto me ha decepcionado
Es él, sin nombre que me ha roto el corazón
Quien me sigue produciendo tal desazón

Es a quien yo tanto he amado, a quien no dejaré de amar,
El imbécil que por más que intento no logro odiar
Él ha usurpado todo rastro de razón en mí
Es el único que ha logrado tener todo lo que yo deseaba aquí.

Él, quien lejos sigue destruyéndome, hiriéndome, matándome, desgarrándome…
Quien ‘no vale la pena’ él que tiene mi corazón en sus manos, olvidándome.
El hombre que yo amo no es un poeta,
Es él, que tiene la mente increíblemente siniestra.

Fue el niño de quien me enamoré,
Es el chico petulante que siempre detesté
O bueno, al menos lo intenté.

El innombrable le dicen, el que sigo queriendo olvidar,
Pero que al mismo tiempo deseo recordar.

A quien todo le di, es el mi corazón
Quien perdió mi felicidad
Cuya persona mi alma se llevó
Él a quien añoro hasta el cansancio
Lo siento, corazón mío, te fallé otra vez.

“Velo negro” – Anabantha. Escrito por: Vlad Landeros.



No logro entender qué es lo que me ahoga
Que es lo que me ciega, es como una tormenta
De inciertos pasajes oscuros
Que inundan mi alma.

Mas la mirada de quien tanto amor siento
Descubre en mí un velo negro
Que no me deja ver la luz
No me deja ver la luz.

Las tardes siempre están nubladas
Y desea nunca ver el sol
Las sombras me están absorbiendo
El amor es el Dios bueno.

Por favor, sígueme amando igual
Y llévame por el camino de la luz
…de la luz…

miércoles, 26 de enero de 2011

Al volante de mi vida

Con toda la vulnerabilidad sobre mí, subí al auto, lo encendí y me dije "La vida es muy corta para lamentarme con hechos del pasado" me alejé de mi casa con una increíble y dichosa felicidad. Seguí avanzando en la infinita carretera, sin un concepto claro de mis actos, sin un copiloto que quisiera guiarme al camino "correcto", sin voces tras de mí queriéndome decir que debo hacer. Solamente yo controlaba mi rumbo y mis pensamientos, completamente en silencio para finalmente decidir. Ignoro la señal de retorno, paso de largo los desvíos exclusivamente sigo un destino, el único. Avanzo a toda velocidad, hago algunas paradas para reflexionar pero continúo sin flaquear. La gasolina de mi auto es el amor, la fuerza de mi cuerpo es la pasión, ¡sigamos avanzando! Seguro nos espera un maravillo destino.

lunes, 24 de enero de 2011

Quisiera ser protagonista de tus sueños

Daría todo sólo por verte sonreír. Que patético fue verte hoy y no haber podido tocarte, que increíble sensación me recorre cuando miras hacia mí a pesar de que no estés aquí, de repente la escena se transforma y te siento cerca. ¿Qué frase ridícula tengo que decir para llamar tu atención? No hay más que decir.

viernes, 21 de enero de 2011

Adiós al pasado / bienvenida al presente.

Son tonterías, invenciones de mi cabeza para traer felicidad...una alegría fingida pero casi perfecta. Sólo con soñar todo es posible, y yo quiero renacer de las cenizas. Empezar de nuevo, haciéndole saber a mi corazón que ya todo está olvidado, confirmando la derrota, limpiando las lágrimas y arrojando los recuerdos. Ha pasado el tiempo suficiente para decir adiós, se ha cumplido la meta de los trescientos sesenta y cinco días, o bueno casi culmina. El piso es demasiado frío, necesito calentarme con el sol y sonreírle al presente. Mi piel desea llenarse de nuevas experiencias, de nuevas alegrías y de nuevas tristezas, no quiero más tocar el pasado ni lamentarme por lo que no pudo ser. Se avecina mi delirante amanecer, las sombras del ayer se ocultan para siempre. Es hora de despedirse de un viejo dolor y darle la bienvenida a nuevas vivencias tanto negativas como positivas. Valió la pena antes, ahora más ya no. La lucha ha terminado, ya no hay más treguas, sólo rendición. Quiero jugármela contigo, quiero vivir un nuevo sentimiento, más sano, sin tanto sufrimiento. Improvisaré el bello amor que tengo y que sea lo que las hadas quieran para mí. Crearé un nuevo mundo y desecharé lo que me sobra. Sólo quiero colmarme de amor, amor y amor. Mi más grande verdad es esta, quiero sonreírme, porque lo dejaré ir....Presente, hazme tuya.

jueves, 20 de enero de 2011

El último día de mi vida


¿Y yo...que haría el último día de mi vida?


Escribiría todas las cosas que pasan por mis pensamientos en ese momento, correría y cometería mi más grande locura, abrazaría a mi familia y diría lo que nunca me atreví a decir.

Le diría a él que lo amo...¡que lo amo! Lo buscaría y encontraría la manera de tenerlo en mis brazos. Mis inseguridades se irían al carajo, bailaría y le gritaría al mundo mi necesidad y forzaría mis sueños a cumplirse en un sólo día. Enviaría cartas a cada una de las personas que me hicieron sentir especial, ignoraría las leyes impuestas por la sociedad. Escucharía las canciones que me hacen feliz y las que me hacen triste. Lloraría hasta que se me secaran las lágrimas...viviría lo que en años nunca viví...Me alejaría de la realidad y dependería de mi demencia...No tendría miedo del final que se acerca, porque estoy segura de que algo mejor está por venir...

martes, 18 de enero de 2011

Ladys Night (Proyecto sin terminar)


Bueno gente, esta novela la hice en colaboración de @Beeibee (Sofía Lozano) Pero la dejamos inconclusa por razones personales, apenas encontré el archivo y me di cuenta de que era un proyecto en potencia, lástima que no lo terminamos como queríamos. Les dejo este pedazo para que lo disfruten...Pd: En la novela somos unas perras hahaha, la versión "Abigail" la escribí yo y la versión "Ximena" la escribió Sofía...


Ladys Night
(Ximena versión)

- Ximena Ferrer – Dijo la Miss de Diseño
- Presente – conteste decentemente

Y es que eso de la decencia es algo fundamental en el ambiente en el que vivo, con puras mascaras que no te dejan ver el verdadero ser de las personas. La vida ha hecho de las suyas conmigo, no soy honesta ni siquiera conmigo misma, debo dar una apariencia delante de los demás & solo con mi BFF Abigail Fematt puedo ser yo misma, sin tapujos ni ataduras. ¿Pero cómo saber quien realmente soy?
Es fácil, soy solo una persona que goza del sufrimiento ajeno, sobre todo del género masculino.
Esos Hombres, patanes, o como los quieran llamar han jugado con mis sentimientos en más de una ocasión, desde mentirillas hasta infidelidades. Por ello he decidido que, antes de que me lastimen de nuevo, yo jugare & los lastimaré, no volveré a ser distracción de nadie.
Debo admitir que no fue por cuenta propia que me volví así. Es más, todo esto se lo debo a mi “hermana” (así la llamo) Abigail, ella me enseño el “arte” de engañar, mentir, hacer creer & fingir emociones, también me mostro lo divertido & satisfactorio que es desquitar toda tu ira y despecho en un hombre.

- Bien, ya pueden salir, hemos concluido la clase de hoy – dijo nuevamente la Miss

De salida me encontré a Abigail, ella acababa de salir de una de sus clases.

- ¿Ya estas lista para esta noche? – me dijo Abigail discretamente
- Si, por supuesto amiga, pero…no sé si pueda ir – le dije insegura
- ¿Por qué no? – dijo en tono de regaño
- Mañana tengo que hacer un trabajo muy complicado, y supongo que pasare toda la noche trabajando en el –
- ¡No me interesa! – me dijo apretando mi brazo – ¡yo ya quede con unos chicos que iríamos de antro con ellos! -
- ¡No me hables así estúpida! – le dije fuertemente mientras zafaba mi brazo de su mano -está bien, vamos, pero ya deja de creerte la autoridad ¿ok? no eres más que una perra mal acomodada -
- ¡Uy! ya cálmate – me dijo sarcástica

Abigail siempre se ha creído más que los demás, con derecho de hacer menos a quien ella quiera, pero ambas tenemos nuestro carácter, así que ponerse en mi contra es toparse con pared, ella no es más que yo, ni yo más que ella, somos bastante similares, pero también tenemos varias diferencias.

- Si fuera tu amiga no te trataría así – Me dijo mi novio Alejandro
- Lo sé, pero no es eso, si es mi amiga pero así nos tratamos, es como una hermandad – le dije tranquilizándolo
- Mira, sonará un poco perturbador lo que te voy a decir, pero muchas veces creo que Abigail es la mismísima encarnación del mal – me dijo mientras se ponía frente a mi
- No seas exagerado – lo empuje – ella si está un poco acelerada, pero no es para tanto -

Y es que yo no le podía decir a Alejandro que las amigas de Abigail decían lo mismo de mí, ya que eso no hablaría bien de mi persona. Solo tenía que quedarme callada al igual que ella, ese era nuestro acuerdo.
No digo que seamos las personas más malas del mundo, solo que en nuestra sociedad no se permite mostrar toda la verdad a la gente, por el “que dirán” pero solo había un lugar en el que podía verme tal cual soy, y era con la protección de la luna bajo el velo nocturno. Así podía ser realmente yo.
Llego la tan anhelada noche. Saldría con Abigail y seguramente estaría muy agitada la noche. Después de todo no le tememos a nada. Después de todo no tengo una figura de autoridad lo suficientemente respetada como para causarme remordimiento de algo de mis actos….
(Abigail versión)

Me encontraba en mis clases de matemáticas en la escuela, mi frustración y aburrimiento se notaba en mis gestos y
suspiros –claro- Pensé sarcástica. Tengo que aguantar a este montón de niños estúpidos que observan
embobados a la maestra Clara. Y todavía peor tengo que aguantar las miradas de los chavos apuntadas a mis pechos y
yo sonriéndoles hipócritamente. –ja ja – Si supieran que si se enamoran de mí o algo así sería como si
cayeran al mismo infierno.
Antes yo no pensaba de esa manera, me enamoré estúpidamente de un hombre…de un animal al que quisiera haber
podido castrar cuanto tuve la oportunidad…Yo era su jueguito, su pendeja…hasta que lo descubrí acostándose
con otra. Fue cuando comprendí que los hombres habían nacido sólo para usarlos como objeto sexual, disfrutar de
sus placeres y cuando ya no sirvan tirarlos como basura en la calle, porque eso es lo que son…un podrido desecho
y nada más. Para divertirme con ellos tengo a mi mejor amiga Ximena, ella es una puta desgraciada igual que yo,
juntas disfrutamos joderle la existencia a aquel hombre que se cruza por nuestro camino, siempre ambas con faldas
cortas y pecho descubierto en los antros cada noche sólo para que los animales caigan en la trampa…como un pez y
la carnada.
Tengo novio, se llama Uriel, es un pobre idiota que vive de por mí y para mí, puedo usarlo a mi antojo como mi
conejillo de indias –Río- Lo puedo traer entre el piso, y el seguiría enamorado de mí ¡pobre imbécil! Cuando
ya no me sirvas te tiraré a los tiburones…ja ja.

La campana para salir del salón por fin sonó y corrí efusivamente para buscar a mi hermana Ximena, hasta que la
observé caminando tranquilamente…lucía igual de coqueta que yo…dejando idiotizados a los chavos que pasaban
cerca de ella.

-¿Ya estás lista para esta noche? –Le dije a Ximena, casi en un susurro.
- Si, por supuesto amiga, pero…no sé si pueda ir – Me contestó inocente.
- ¿Por qué no? – dije enfurruñada
- Mañana tengo que hacer un trabajo muy complicado, y supongo que pasare toda la noche trabajando en el –
replicó
- ¡No me interesa! – contesté apretando su brazo – ¡yo ya quede con unos chicos que iríamos de antro con
ellos! -
- ¡No me hables así estúpida! – Me dijo fuertemente mientras zafaba su brazo de mi mano -está bien, vamos,
pero ya deja de creerte la autoridad ¿ok? no eres más que una perra mal acomodada
- ¡Uy! ya cálmate – le dije con sarcasmo. Ambas sabíamos que las dos éramos las perras del colegio y eso nos
enorgullecía. Aunque como las dos éramos de fuerte actitud sabía que no podía regañarla ni meterme con ella,
así que no hice ningún comentario más.

Ambas nos dirigimos a mi casa para arreglarnos como se debía para ir al antro por la noche, sabía con
satisfacción que iríamos a jugar un rato con los chicos, darles lo que quieren y después poder mandarlos al
carajo.

Paso la tarde sin acontecimientos, casi anochecía y yo me estaba engalanando. Me coloqué una minifalda de
mezclilla que dejaba ver mis piernas desnudas y una blusa verde de coloquial escote que mostraba mis pechos sin
pena. –Sonreí satisfecha- Esto dejaría a los hombres anonadados, cayendo en el teatrito, les daría mi cuerpo,
lo que pidieran. Los engatusaría, engancharía, enamoraría y finalmente los dejaría lamiendo el piso –qué
divertido sería-

-¿Ya te arreglaste? – Le pregunté a Ximena que aun se encontraba en el segundo piso.

-Sí, ¡enseguida bajo! – Me gritó.
Al verla bajar me reí fuertemente, ella y yo éramos tan parecidas. Igual de desgraciadas y de putas. Bueno tal
vez yo más. Ella traía puesto un minivestido ajustado de color rosa que acentuaba su excelente figura, con un
escote intenso en la espalda. –Nos sonreímos –

-Vámonos- Le dije jalando de su mano mientras nos subíamos al coche. Conduje en silencio mientras Ximena hojeaba
una revista. Llegamos rápidamente al antro más conocido de Monterrey, el más vulgar. Perfecto para nosotras.
Identifiqué a mis “amigos” y los saludé coquetamente mientras les guiñaba el ojo –pobres tontos- Pensé
otra vez.

¡Hola chicos! Les presento a Ximena –Les dije mientras uno de esos cerdos colocaba sus manos debajo de mi
cintura. Todos los chicos miraban de arriba abajo a mi amiga con los ojos saliéndose de sus orbitas. Mi hermana se
acercó y les dio un sonoro beso en la comisura de sus labios. Los imbéciles estaban encantados con nosotras.
Ximena se alejó a bailar con uno de ellos. Todos se fueron yendo a bailar y yo me quedé sola con el animal de
Marco.
-Bebé ¿bailamos? – Me preguntó con repugnante voz seductora
-Claro que sí guapo – Respondí con mi ya practicada voz infantil.

Comenzamos a bailar lentamente, me dio muchísimo asco cuando comenzó a darme besos en el cuello y puso sus manos
en mi cintura. Pero yo fingí y le sonreí como pude, acaricié su cabello y lo demás que recuerdo fue que subimos
a unos cuartos en el segundo piso del antro. Había una cama sucia y fea…

¿Traes condón? – Le pregunté indiferente mientras el animal seguía acariciando mi cintura.
-Eh sí- Dijo aturdido. Se quitó la ropa y después comenzó a desvestirme a mí. Me arrancó la blusa y
desabrochó mi brassiere y yo dejé escapar una lágrima de mis ojos. Eso era lo único que querían los hombres de
mí, mi cuerpo. Pues ahora bien, ahora yo haré lo mismo….

La carta que nunca le daré a papá.


Gracias papá, gracias por aquel día en que por primera vez me prestaste atención y salvaste mi vida de la muerte, te agradezco papá porque crees que el dinero es lo único que necesito para ser feliz.

  ¿Por qué nunca me miras a los ojos, papá? ¿por qué castigas cruelmente mis errores y no celebras mis éxitos? Abrázame que soy tu hija, a la que nunca pudiste comprender. Yo sé que con él hablarás de fútbol, con ella hablarás de la universidad, ¿conmigo qué será? ¿jugarás un día en la casita de las muñecas conmigo?

  Papá soy muy pequeña, por más que tiro de tu ropa y te digo "Papi, sígueme" no logro conseguir tu atención, ni tu sonrisa diciéndome algo. Papi ¿acaso me odias? Quizá te arrepientas de haberme tenido, no lo sé.

  En tantas noches de lágrimas anhelé tu resguardo pero nunca estuviste ahí, el trabajo fue lo primordial. En mis noches de confusión tenía tanto miedo de dirigirte la palabra que agachaba la mirada y me encerraba por horas interminables en mi recámara. ¿No hay nada que valga la pena en mí, papá? ¡Escúchame! Mi silencio te grita.

  Ese día dijiste que la puerta era muy grande y que cuando quisiera irme lo hiciera. ¿por qué no me dejaste morir ese día, papá? Estoy huyendo de ti, no quiero que me veas llorando, quiero que tengas la misma imagen de mí..."La adolescente mimada", "la irresponsable", "la que no es como su hermana".

  Papá, cuando viste mis cortadas sólo anunciaste que yo estaba loca, ¿por qué no me ayudaste, papá? Estaba muriendo lentamente y tú ¿donde estabas? Mírame a los ojos, sé que no soy la hija que querías, soy el error que te ama tanto, ¿jugarás a las muñecas conmigo?

  Te amo papá, te amo, estoy segura de que algún día volverás a salvarme, esta vez no de la muerte, sino de algo todavía más fuerte.

domingo, 16 de enero de 2011

Imaginary

Bienvenido a mi mundo imaginario, aquí sólo se es permitido soñar.
Aquí guardo mis más grandes sueños, duermo y me encierro en mi mundo de cristal, no permito que la realidad provoque mis lágrimas…Pues solamente vivo de una fantasía.

Creo cosas imposibles, me rodean nubes púrpuras, los ríos saben a un dulce exquisito, los árboles están acaramelados, aquí todo es ensueño, no hay dolor, juro que no hay dolor.

No quiero despertar, no quiero que la realidad me amargue la utopía…Tu maldita realidad me está pudriendo viva, por eso escapo…corro muy lejos…hacia mi imaginación.
Es en donde puedo escribir que te amo, es en donde estás conmigo, aquí jamás me olvidarás, siempre estaremos juntos…Entre risas y sonrisas, sobre besos melosos…con un amor infinito, imaginario…

Quédate conmigo, inventemos un lugar lleno de flores de papel, repleto de unicornios blancos. Me remontaré dentro de mi cerebro, huiré a un mundo en el que mi voz grita y todos escuchan.
Acá no hay dolor, los monstruos no gritarán mi nombre, sólo habrá felicidad y el llanto se apagará, no quiero despertar, tengo tanto miedo de encontrarme con lo real en donde existe mi más grande agonía, mi interminable dolor. No quiero salir de lo imaginario, quiero vivir para siempre en mi campo de flores de papel…Pues no acepto perderte, me niego a la tristeza… ¡qué alegría que exista lo imaginario para auxiliarte de la desdicha! Gracias a que existen los sueños no me he dejado morir….Quiero vivir, quiero vivir, quiero vivir en mi imaginación…rodeada de colores que no existen, acariciando mis enormes y hermosas alas, creyendo que estás…

No me despiertes, ¡no!

sábado, 15 de enero de 2011

El cuervo - Edgar Allan Poe

Una vez, al filo de una lúgubre media noche,
mientras débil y cansado, en tristes reflexiones embebido,
inclinado sobre un viejo y raro libro de olvidada ciencia,
cabeceando, casi dormido,
oyóse de súbito un leve golpe,
como si suavemente tocaran,
tocaran a la puerta de mi cuarto.
"Es -dije musitando- un visitante
tocando quedo a la puerta de mi cuarto.
Eso es todo, y nada más."

¡Ah! aquel lúcido recuerdo
de un gélido diciembre;
espectros de brasas moribundas
reflejadas en el suelo;
angustia del deseo del nuevo día;
en vano encareciendo a mis libros
dieran tregua a mi dolor.
Dolor por la pérdida de Leonora, la única,
virgen radiante, Leonora por los ángeles llamada.
Aquí ya sin nombre, para siempre.

Y el crujir triste, vago, escalofriante
de la seda de las cortinas rojas
llenábame de fantásticos terrores
jamás antes sentidos. Y ahora aquí, en pie,
acallando el latido de mi corazón,
vuelvo a repetir:
"Es un visitante a la puerta de mi cuarto
queriendo entrar. Algún visitante
que a deshora a mi cuarto quiere entrar.
Eso es todo, y nada más."

Ahora, mi ánimo cobraba bríos,
y ya sin titubeos:
"Señor -dije- o señora, en verdad vuestro perdón
imploro,
mas el caso es que, adormilado
cuando vinisteis a tocar quedamente,
tan quedo vinisteis a llamar,
a llamar a la puerta de mi cuarto,
que apenas pude creer que os oía."
Y entonces abrí de par en par la puerta:
Oscuridad, y nada más.

Escrutando hondo en aquella negrura
permanecí largo rato, atónito, temeroso,
dudando, soñando sueños que ningún mortal
se haya atrevido jamás a soñar.
Mas en el silencio insondable la quietud callaba,
y la única palabra ahí proferida
era el balbuceo de un nombre: "¿Leonora?"
Lo pronuncié en un susurro, y el eco
lo devolvió en un murmullo: "¡Leonora!"
Apenas esto fue, y nada más.


Vuelto a mi cuarto, mi alma toda,
toda mi alma abrasándose dentro de mí,
no tardé en oír de nuevo tocar con mayor fuerza.
"Ciertamente -me dije-, ciertamente
algo sucede en la reja de mi ventana.
Dejad, pues, que vea lo que sucede allí,
y así penetrar pueda en el misterio.
Dejad que a mi corazón llegue un momento el silencio,
y así penetrar pueda en el misterio."
¡Es el viento, y nada más!

De un golpe abrí la puerta,
y con suave batir de alas, entró
un majestuoso cuervo
de los santos días idos.
Sin asomos de reverencia,
ni un instante quedo;
y con aires de gran señor o de gran dama
fue a posarse en el busto de Palas,
sobre el dintel de mi puerta.
Posado, inmóvil, y nada más.

Entonces, este pájaro de ébano
cambió mis tristes fantasías en una sonrisa
con el grave y severo decoro
del aspecto de que se revestía.
"Aun con tu cresta cercenada y mocha -le dije-.
no serás un cobarde.
hórrido cuervo vetusto y amenazador.
Evadido de la ribera nocturna.
¡Dime cuál es tu nombre en la ribera de la Noche Plutónica!"
Y el Cuervo dijo: "Nunca más."
Cuánto me asombró que pájaro tan desgarbado
pudiera hablar tan claramente;
aunque poco significaba su respuesta.

Poco pertinente era. Pues no podemos
sino concordar en que ningún ser humano
ha sido antes bendecido con la visión de un pájaro
posado sobre el dintel de su puerta,
pájaro o bestia, posado en el busto esculpido
de Palas en el dintel de su puerta
con semejante nombre: "Nunca más."


Mas el Cuervo, posado solitario en el sereno busto.
las palabras pronunció, como virtiendo
su alma sólo en esas palabras.
Nada más dijo entonces;
no movió ni una pluma.
Y entonces yo me dije, apenas murmurando:
"Otros amigos se han ido antes;
mañana él también me dejará,
como me abandonaron mis esperanzas."
Y entonces dijo el pájaro: "Nunca más."

Sobrecogido al romper el silencio
tan idóneas palabras,
"sin duda -pensé-, sin duda lo que dice
es todo lo que sabe, su solo repertorio, aprendido
de un amo infortunado a quien desastre impío
persiguió, acosó sin dar tregua
hasta que su cantinela sólo tuvo un sentido,
hasta que las endechas de su esperanza
llevaron sólo esa carga melancólica
de "Nunca, nunca más."

Mas el Cuervo arrancó todavía
de mis tristes fantasías una sonrisa;
acerqué un mullido asiento
frente al pájaro, el busto y la puerta;
y entonces, hundiéndome en el terciopelo,
empecé a enlazar una fantasía con otra,
pensando en lo que este ominoso pájaro de antaño,
lo que este torvo, desgarbado, hórrido,
flaco y ominoso pájaro de antaño
quería decir granzando: "Nunca más,"

En esto cavilaba, sentado, sin pronunciar palabra,
frente al ave cuyos ojos, como-tizones encendidos,
quemaban hasta el fondo de mi pecho.
Esto y más, sentado, adivinaba,
con la cabeza reclinada
en el aterciopelado forro del cojín
acariciado por la luz de la lámpara;
en el forro de terciopelo violeta
acariciado por la luz de la lámpara
¡que ella no oprimiría, ¡ay!, nunca más!

Entonces me pareció que el aire
se tornaba más denso, perfumado
por invisible incensario mecido por serafines
cuyas pisadas tintineaban en el piso alfombrado.
"¡Miserable -dije-, tu Dios te ha concedido,
por estos ángeles te ha otorgado una tregua,
tregua de nepente de tus recuerdos de Leonora!
¡Apura, oh, apura este dulce nepente
y olvida a tu ausente Leonora!"
Y el Cuervo dijo: "Nunca más."

"¡Profeta! exclamé-, ¡cosa diabolica!
¡Profeta, sí, seas pájaro o demonio
enviado por el Tentador, o arrojado
por la tempestad a este refugio desolado e impávido,
a esta desértica tierra encantada,
a este hogar hechizado por el horror!
Profeta, dime, en verdad te lo imploro,
¿hay, dime, hay bálsamo en Galaad?
¡Dime, dime, te imploro!"
Y el cuervo dijo: "Nunca más."

"¡Profeta! exclamé-, ¡cosa diabólica!
¡Profeta, sí, seas pájaro o demonio!
¡Por ese cielo que se curva sobre nuestras cabezas,
ese Dios que adoramos tú y yo,
dile a esta alma abrumada de penas si en el remoto Edén
tendrá en sus brazos a una santa doncella
llamada por los ángeles Leonora,
tendrá en sus brazos a una rara y radiante virgen
llamada por los ángeles Leonora!"
Y el cuervo dijo: "Nunca más."

"¡Sea esa palabra nuestra señal de partida
pájaro o espíritu maligno! -le grité presuntuoso.
¡Vuelve a la tempestad, a la ribera de la Noche Plutónica.
No dejes pluma negra alguna, prenda de la mentira
que profirió tu espíritu!
Deja mi soledad intacta.
Abandona el busto del dintel de mi puerta.
Aparta tu pico de mi corazón
y tu figura del dintel de mi puerta.
Y el Cuervo dijo: Nunca más."

Y el Cuervo nunca emprendió el vuelo.
Aún sigue posado, aún sigue posado
en el pálido busto de Palas.
en el dintel de la puerta de mi cuarto.
Y sus ojos tienen la apariencia
de los de un demonio que está soñando.
Y la luz de la lámpara que sobre él se derrama
tiende en el suelo su sombra. Y mi alma,
del fondo de esa sombra que flota sobre el suelo,
no podrá liberarse. ¡Nunca más!

Pocos sentidos


-Es que yo no quiero que te enamores de mí, yo no quiero que me ames – Articuló cada palabra con suma suavidad como si deseara acariciar cada expresión.

Entonces lo entendí, realmente no deseaba ni que me acercara a él por miedo a que yo me enamorara, pues, no le interesaba yo en absoluto, ahora lo entendía, pero era demasiado tarde, mi corazón sufrió un golpe innecesario y terrible, ¿Tan poca cosa era yo para alguien como él?.

-No me lo tomes a mal – Habló de nuevo poniendo sus manos sobre mi barbilla – Creo que me gustas más de la cuenta, y ese es el verdadero problema, corres mucho peligro si te enamoras de mí, así que lo mejor será que nos alejemos el uno del otro – Finalizó con tristeza.

-Pero ya es demasiado tarde – me quejé – Pudiste haberme dicho todo es te discurso mucho antes, no es nada justo – Comencé a llorar.

-Lo siento de verdad, no quería llegar a esto, debo irme, perdóname, adiós…

¡Ploooooooooooooooooooock!
Un golpe en mi mesa de trabajo me hizo despertarme de aquella terrible pesadilla.

-¡Señorita Corina! ¡Pondrá atención a la clase o si desea dormir puede salirse del salón! – Me gritó cerca del oído la maestra de química, mis mejillas se encendieron ante la mirada burlona de mis compañeros de escuela, la maestra se alejó y volví a recostarme sobre mi mesa.

-¿Te quedaste dormida? – Se burló Carolina, mi mejor amiga que se encontraba en el asiento contiguo

-No pude dormir en toda la noche – me quejé – Acabo de tener una terrible pesadilla, así que no me molestes.

jueves, 13 de enero de 2011

If time is all I have – James Blunt (Traducida)


Cuando despiertes enciende la radio, y escucharás esta sencilla canción que compuse, que compuse para ti. Cuando conduzcas súbele el volumen a la radio porque no puedo cantar lo suficientemente fuerte, es difícil en estos días conseguir trasmitir mi mensaje.
Si el tiempo es todo lo que tengo lo gastaré en ti. Traeré de vuelta cada día, es lo que hacen los quebrantados del corazón. Estoy cansado de hablarle a un espacio vacío, de silencios que me mantienen despierto.
Cuando te cases y mires a tu alrededor, en algún lugar de esa multitud estaré yo, destrozado, es que no será conmigo. Cuando envejezcas y los recuerdos se desvanezcan sé que aún sentiré lo mismo ¡Sí! Mientras siga con vida…
Si el tiempo es todo lo que tengo lo gastaré en ti. Traeré de vuelta cada día, es lo que hacen los quebrantados del corazón. Estoy cansado de hablarle a un espacio vacío, de silencios que me mantienen despierto.
¿No dirás mi nombre? Una vez, ¡por favor! Tan sólo di mi nombre.
Si el tiempo es todo lo que tengo lo gastaré en ti. Traeré de vuelta cada día, es lo que hacen los quebrantados del corazón. Estoy cansado de hablarle a un espacio vacío, de silencios que me mantienen despierto.
Si el tiempo es todo lo que tengo lo gastaré en ti. Traeré de vuelta cada día, es lo que hacen los quebrantados del corazón. Estoy cansado de hablarle a un espacio vacío, de silencios que me mantienen despierto.
¿No dirás mi nombre cuando esta canción acabe?

miércoles, 12 de enero de 2011

No tendré miedo, porque tú estarás ahí...¿verdad que así será?


Ayúdame a no sentir más frío,
ayúdame a olvidarme del pasado,
ayúdame a sentir otra vez,
ayúdame a enamorarme,
ayúdame a empezar de nuevo,
ayúdame a disminuir el dolor,
deten la desilusión, termina la decepción en mi corazón.

Sácame de aquí, regálame libertad,
ama a mi alma, no me dejes caer,
envuélveme en un abrazo, cura las heridas,
auxiliame...me estoy muriendo ¿que no lo ves?

Hazle saber que has ganado mi corazón,
demuéstrame la dicha de reírme sin control,
ámame, me han descuidado...necesito tanto de ti...


martes, 11 de enero de 2011

¡Estaba junto a mí! Flaqueé


¿Donde estás tú? Miro mi cielo sobre mí, simplemente callo para no cometer un error, para no equivocarme de nuevo, para que mi corazón no domine mi cuerpo como siempre lo hace, para que el sentimiento de miedo no me ataque de nuevo, cuanto miedo. Tantos nervios. Él está tan cerca. Mejor escaparé.

lunes, 10 de enero de 2011

Lo vi hoy y otra vez el cielo se iluminó.

Qué necesidad...Dios mío, hoy le he visto otra vez y su mirada cautivante me ha atrapado de nuevo. Qué pena ¿por qué siempre tengo que hacer el ridículo cuando él anda cerca? Me observa extrañado sin saber que guardo a una tímida niña en mi interior. Qué hermoso es su rostro, vaya ternura que trasmiten sus finos labios. Quisiera adivinar sus pensamientos, conocer algo más que su suave físico. Deseo saber si sus pensamientos concuerdan con los míos. Creer que es la persona que imagino, no quiero enfrentar una decepción más. Sueño estúpidamente con estar segura en un abrazo suyo, sueño que él reúna los trozos de mi corazón y finalmente logre arreglarlo. Mi alma lo escogió a él para mantener lejos las pesadillas, para después de un año amargo volver a ser feliz. Si mi ensueño es un cuento de hadas, mínimo sea él mi príncipe rescatador...en mi campo de flores de papel. Mi último aferro a la esperanza. Pequeño tonto deseo iluso. Mi guitarrista de la esquina.

Remember me


No entiendo porqué si las cosas han cambiado tanto me sigo sintiendo igual, tú sufres por ella y yo sufro por ti, tú la amas a ella y yo te amo a ti, tú le ofreces todo aquel amor que preferiste ignorar de mí, tú todo el tiempo estás pensando en ella, yo no puedo vivir, ni siquiera dormir por pensar en ti. Desde que te fuiste mi existencia es un asco, todo lo que alguna vez tuvo sentido lo perdió para siempre, me dejaste una herida imborrable, a veces creo que nunca te dejaré de amar, que estoy condenada a estar sola y a llorar por tu adiós que no se fue.

domingo, 9 de enero de 2011

Estar con él


El tiempo pasa lentamente y es cruel
mis labios sangran dejando huellas imborrables
Por esta vez ya no tengo nada que perder.


Sigo preguntandole a mi memoria ¿cuando? ¿cómo?
En que momento me volví dependiente de su ser,
trato de olvidar, trato de recordar sin dolor, pero ¡nada funciona!
Desahogo las piezas que finalmente he podido armar y digo de nuevo
lo único que deseo es estar junto a él.


Desesperación, anhelo ser un ave, colocarme en su ventana y verlo dormir,
sólo quiero ver su rostro ¡sólo quiero tocarlo!
Que mi corazón sabe que él es real, pero mi cuerpo no.


Palpar su bello rostro de nieve, morder sus gruesos labios...¡acariciar su pecho desnudo!
Que mi mano vibre de nervios sobre su cuerpo despojado de telas inservibles...
Besarle el cuello, besarle el alma, que me muerda, que me tenga, que él sea mío.


Mis manos dicen "Detente" pero mis labios dicen..."No te detengas" Quítame la respiración, provoca mis suspiros y disfruta mis gemidos...Susurrame al oído que me amas ¡y yo te creeré! Aunque sea un sueño imaginaré que esto es real. Permíteme aventurar por cada parte existente en tu cuerpo, ¡ya no juegues más con mi cabello! Estoy muriéndome amor, estoy muriendo...


Arranca las vestiduras que entorpecen nuestro deseo, despójalas de mí, arrojalas al suelo...que nada interrumpa este hermoso apetito de ti...


Penetrame lentamente y con dulzura mi amor, en estos sueños que hierven mis pensamientos, para abrir los ojos y vernos desnudos arropados por una fina sábana testigo de nuestro salvaje encuentro y verme segura entre tus brazos...

miércoles, 5 de enero de 2011

Love, love, love - James Blunt


No estoy en busca de nosotros y tampoco deberías tú. Absolutamente hermosa, entonces nada de lo que digo es cierto, no te encontrarás a ti misma en estos ojos culpables.
Porque quiero a cualquiera lo suficientemente tonta para creerme y tú sólo eres una de tantas a las que rompí el corazón y por eso digo: “No te amo”…A pesar de que eso me mata, es una mentira que te deja libre.
Envolveré mi cuerpo en brazos de otras mujeres, haré el amor rápidamente, me sentiré mejor de lo que estoy. Espero que te encuentres a ti misma en los ojos de alguien más.
Porque quiero a cualquiera lo suficientemente tonta para creerme y tú sólo eres una de tantas a las que rompí el corazón y por eso digo “No te amo”…A pesar de que eso me mata, es una mentira que te deja libre.
Amor, amor, amor…no puedo tener tu amor, amor, amor. ¡Y por eso digo: “No te amo”!
(Amor, amor, amor)
Porque quiero a cualquiera lo suficientemente tonta para creerme.
(Amor, amor, amor)
Y tú sólo eres una de tantas a las que rompí el corazón.
(Amor, amor, amor)
Y por eso digo: “No te amo”, a pesar de que eso me mata, porque es mentira.
(Amor, amor, amor)
Porque quiero a cualquiera lo suficientemente tonta para creerme, y tú sólo eres una de tantas a las que rompí el corazón, y por eso digo “No te amo”. A pesar de que eso me mata, porque es la mentira que te deja libre, te deja libre…

sábado, 1 de enero de 2011

El encuentro - Katherine Mansfield


Comenzamos a hablar
¬Nos miramos; dejamos de mirarnos
Las lágrimas ascendían a mis ojos
Pero no podía llorar
Deseaba tu mano
Pero mi mano temblaba.
No dejabas de contar los días
Para nuestro siguiente encuentro
Pero las dos sentíamos en el corazón
Que nos separábamos para siempre.
El crujido del reloj llenaba la habitación,
Escucha, dije, es tan fuerte
Como el galope de un caballo en un sendero solitario
Así de fuerte - un caballo galopando en la noche.
Me hiciste callar en tus brazos
¬Pero el sonido del reloj ahogó el latido de nuestros corazones.
Dijiste `No puedo irme: todo lo que vive de mí
Está aquí para siempre'.
Después te fuiste.
El mundo cambió. El ruido del reloj se hizo débil
Se fue perdiendo –se tornó minúsculo-
Susurré en la oscuridad: “Moriré si se detiene”.